ANALISIS ECONOMICO
Sunday, March 26th, 2017Nivel de actividad: la
gente no sentirá mejora
Por Verónica Sosa
directora de EyR
La economía no crecerá “en serio” este año, con un nivel de actividad que le permita a la ciudadanía sentir una mejora. Es decir, no va a haber un aumento sustancial del empleo privado genuino y permanente, tampoco una mejora sustancial del salario real; por ende no habrá que esperar una fuerte recuperación del consumo.
¿Se terminó la recesión? ¿Hay brotes verdes? Son dos de las preguntas más repetidas actualmente entre los diferentes actores del mundo económico. Claramente, si se hacen estas dos preguntas, quiere decir que el mercado todavía tiene dudas con respecto a que nuestra economía este ya creciendo.
¿Se terminó la recesión? Técnicamente y a modo de convención, la profesión define que una recesión termina cuando hay dos trimestres consecutivos con crecimiento desestacionalizado. En este marco, según los datos del INDEC se puede decretar el fin técnico de la recesión ya que el tercer trimestre (+0,1%) creció con respecto al segundo y el cuarto (+0,5%) se expandió con respecto al tercero.
Sin embargo, de acuerdo con el PBG E&R llevamos un solo trimestre con variación positiva, por consiguiente muy probablemente haya que esperar los datos del cierre del primer trimestre de 2017 para poder decretar el fin técnico de la recesión. En este sentido y según nuestro indicador, el tercer trimestre (0,1%) cayó con respecto al segundo, mientras que el cuarto período (+0,9%) presentó una variación positiva con respecto al tercero.
En realidad no hay diferencias entre el indicador del INDEC y el de E&R, porque ambas mediciones muestran que en el tercer trimestre 2016 la economía permaneció estancada con respecto al segundo trimestre del año pasado:+0,1% INDEC y -0,1% E&R; respectivamente. Por consiguiente, se podría decir que tanto para el INDEC como para E&R la economía lleva tan sólo un trimestre de variación positiva (cuarto contra tercer trimestre 2016), con lo cual el fin técnico de la recesión sólo se podría decretar a fines del primer trimestre 2017. En este sentido y de acuerdo con nuestras estimaciones, el PBI del primer trimestre 2017 dará positivo con respecto al cuarto trimestre 2016.
Cuando miramos los datos anuales, se aprecia que el PBI del INDEC (-2,3%) y el PBG E&R (-2,4%) muestran una similar contracción del nivel de actividad económica en 2016. Es más estas diferencia se debe exclusivamente al diferente trato que ambos índices brindan al componente impositivo.
Analizando nuestro PBG que mide el nivel de actividad de E&R, el gran perdedor de 2016 resultó el sector de la construcción, afectada por el incremento de los costos (ene-dic el ICC INDEC nivel general creció 32,3%, los materiales 27,5%, 32,9% la mano de obra y 50,5% los gastos generales) y la paralización de la obra pública. El consumo de cemento cayó 10,7%, disminuyendo 8,3% el consumo en bolsa y 14,8% el consumo a granel. Cabe destacar que el cemento a granel se asocia a obras de mayor tamaño relativo, las cuales, según el IERIC están estrechamente más relacionadas a la ejecución de obras de infraestructura (financiadas en su mayoría por la inversión pública).
La industria manufacturera también presentó un importante descenso interanual (-5,9%), que fue además generalizada al interior del sector. El nivel de actividad de Brasil perjudicó la industria automotriz y la caída de la construcción afectó la producción de minerales no metálicos y la demanda de hierro redondo para hormigón. El sector textil mostró una caída debido a la retracción del consumo interno y el incremento de las importaciones de ciertos segmentos con una consiguiente acumulación de stocks.
La actividad agrícola-ganadera también se encontró entre las mayores bajas interanuales del 2016 (-5,8%). Cabe señalar que por un lado muchas decisiones de siembra se dieron previos a la eliminación del cepo al dólar y la suba del tipo de cambio y por otra parte se presentaron inundaciones y heladas en ciertas provincias que afectaron la cosecha. Entre los principales cultivos puede señalarse que la cayeron la producción de soja (-4,2%), girasol (-5%), trigo (-18,9%), sorgo (-2,2%) y entre las economías regionales cayó el algodón (-15,5%), el tabaco (-14,1%) y las peras y manzanas (-25,8%).
La intermediación financiera que tiene una participación del 5,2% terminó el 2016 con una baja del 3,1%. Los préstamos presentaron caídas interanuales reales al final de cada trimestre y los depósitos con bajas en IIT (-6,2%) y IIIT (-7,8%) y leves subas reales en el IT (+1%) y IVT (+0,4%).
Con un aporte del 12,1% el comercio presentó una caída del 2,3% en 2016 debido a la retracción real de las ventas en supermercados (-7,8%), shoppings (-11,1%) y transferencias de autos usados (-14,5%) que no lograron ser compensadas por las subas en los patentamientos (+11%) y el comercio mayorista (+1,4%).
Las actividades relacionadas con el sector público como salud (+2,1%), educación (+1,4%) y administración pública y defensa (+1,4%) se encuentran entre los ganadores del año 2016. También se puede señalar el incremento en transporte (+3,1%) relacionado con mayor corriente de bienes destinados a molienda y la suba moderada de electricidad, gas y agua (+0,4%) que guarda relación con una mayor demanda de energía eléctrica (+0,7%).
Todas las regiones presentaron en 2016 bajas interanuales con respecto al año anterior.
Cuyo (-5,3%): fue la región con mayor baja afectada por descensos importantes en la agricultura (-15,9%) y la industria (-13,3%) relacionados al cultivo de vid y la producción de vinos comprometidas por heladas y granizos que dificultaron la cosecha.
Centro (-3,8%):? el descenso de la actividad se relaciona con el sector agrícola-ganadero (-12,2%), que presentó una fuerte retracción por la menor cosecha, la contracción de la construcción (-10,7%) y la industria (-5,4%) por la baja de la producción automotriz Patagónica (-2%): la minería es la actividad con mayor peso en la región y la misma presentó una baja del 2,7% en 2016. Otras actividades que afectaron la actividad patagónica fueron la industria (-6,6%), el comercio (-2,6%) y la construcción (-15,1%).
Pampeana? (-1,9%): la industria aporta el 20,1% del PBG de la región y presentó una disminución del 5,4%. El comercio, con una participación del 12,5% se retrajo un 2.5%.
NEA (-0,7%?): la leve disminución en el nivel de actividad se relaciona con las bajas en el comercio (-3,7%), construcción (-11%) e industria (-2,6%) al tiempo que se presentaron subas en electricidad, gas y agua (+5,1%), transporte (+3,3%) y hoteles y restaurantes (+3,4%).
NOA (-0,3%): es? la región con la menor caída interanual gracias a la buena performance del sector agropecuario (+3,2%) y electricidad, gas y agua (+2,3%).Sin embargo, presentó bajas en la industria (-3,1%), construcción (-12,4%), comercio (-4%).
¿Qué pasará con el nivel de Actividad en 2017? De acuerdo con nuestro análisis, presentamos un escenario base con una variación positiva del PBI de +1,8% donde es necesario destacar la baja base de comparación que deja la caída del -2,4% del año 2016. El arrastre estadístico3 para el 2017 es del 0,1%. Es decir, si el 2017 se comportara igual que el cuarto trimestre de 2016 el crecimiento interanual alcanzaría al 0,1% (siempre hablando del indicador desestacionalizado).
Pero, ¿esto implica que la economía volverá a crecer de manera sostenida a lo largo del tiempo? La economía no crecerá “en serio” este año, con un nivel de actividad que le permita a la ciudadanía sentir una mejora. Es decir, no va a haber un aumento sustancial del empleo privado genuino y permanente, tampoco una mejora sustancial del salario real; por ende no habrá que esperar una fuerte recuperación del consumo.
El 2016 fue un año recesivo con caída del PBI -2.4%, cualquier estimulo de la demanda agregada (impulsada por más gasto en obra pública) impactara positivamente en el producto debido a la baja comparación de la base estadística. Entonces, no podemos hablar de crecimiento cuando en realidad es una mera recuperación de la actividad económica (“el rebote del gato muerto”). Dicho de otra manera, en 2017 la economía mejora fundamentalmente por la mala base de comparación que fue 2016.
Por el contrario, no habría crecimiento “en serio” porque no habría un proceso de fuerte inversión privada que permitiera expandir la producción y mejorar la productividad. Sin inversión y sin aumento de las posibilidades de producción no hay creación de empleo y aumento de demanda de trabajo, en consecuencia no puede haber mejora del salario real.
En otras palabras, no habría creación de puestos de trabajo privados genuinos, incremento de salario real ni un aumento sostenido del PBI per cápita hasta que no se modifique la política fiscal, de manera que incentive la inversión privada y su consiguiente aumento de la producción.
Los primeros meses de 2017 no muestran reactivación generalizada del nivel de actividad si se lo compara con 2016. En términos interanuales, CAME indica una caída del consumo minorista tanto en enero (-2,5%) como en febrero (-4,1%) mientras que las ventas de supermercados (-11,2%) y shoppings (-10%) también presentaron bajas reales en el primer mes del año. En materia de construcción, el consumo de cemento presentó una suba moderada en enero (+1,8%) pero caída en febrero (-0,4%), mientras el ISAC disminuyó en enero (-2,4%) y el índice construya en los primeros dos meses del año. Con respecto a la industria manufacturera con excepción de FIEL, el EMI de INDEC y el indicador de OJF arrojan caídas en enero, y en febrero disminuyeron tanto IPI de FIEL como el IPI de OJF. En particular la industria automotriz habría presentado un buen enero, pero en febrero volvieron a disminuir tanto la producción como las exportaciones.
En E&R estimamos que luego de un IT sin variaciones interanuales el IIT y IIIT de 2017 serían los mejores del año con un IVT que presente una suba del 1,9%. Esto nos arroja una variación interanual promedio del 1,8% y una punta a punta (es decir a fin de este año contra el IVT de 2016) del 1,9%. Sin embargo, el presupuesto para este año estima un crecimiento interanual del 3,5%, para lo que es necesario trimestres de importantes subas interanuales, superiores al 5% y un incremento del PBI punta a punta del 5,2%. Por otra parte, desde E&R estimamos un incremento trimestral desestacionalizado más significativo en los primeros dos trimestres del año. (Diario EL LIBERAL, Director Gustavo Ick)